Tras el descubrimiento del cuerpo de Andrew Earlham la policía busca al asesino y Laura se ve arrastrada por la destrucción de Andrew de nuevo.

Laura se apoya en sus seres queridos sintiendo la presión de la investigación de Renton. Cuando Ian se convierte en sospechoso Laura se pregunta en quién puede confiar.

Winnie confiesa algo sorprendente y Laura le pide ayuda a un antiguo aliado. El interés de la prensa y la volatilidad de Katy hacen peligrar el progreso de Laura.

La investigación da un giro inesperado y unos secretos salen a la luz. ¿Deberá Laura enfrentarse a su pasado como Andrew?

Una prueba clave sale a la luz. Laura busca el origen de la prueba y con ayuda de Katy y Liam descubre un nuevo sospechoso.

Laura toma medidas drásticas para que Oliver se responsabilice y para que salga a la luz la verdad sobre la muerte de Andrew.