Después de un largo paréntesis, Sylvia se reencuentra con su viejo mejor amigo, el recién divorciado Will.

Will acompaña a Sylvia a unas puertas abiertas. Sylvia ayuda a Will a colarse en la casa de su exmujer para coger el resto de sus cosas y cortar por lo sano.

Mientras el marido de Sylvia está en una conferencia, ella se pasa el día emborrachándose con Will, que le informa de una novedad de su bar.

Sylvia celebra una fiesta del divorcio para Will para animarlo, pero se va de las manos cuando sus revoltosos amigos intentan tomar las riendas de la noche.

Nervioso por la cercanía de la relación de Will y Sylvia, Charlie invita a Will a unirse a él y a sus compañeros de trabajo en un partido de béisbol.

Will presenta a Sylvia a su nueva novia mucho más joven, Peyton, y luego, se enfada cuando Sylvia la contrata como su niñera.

A Sylvia le cuesta aguantar el ritmo brutal en su nuevo bufete. Will descubre los nuevos planes de Reggie y Andy.

Will y los chicos se llevan a Sylvia a un viaje de negocios a San Diego. Charlie cada vez sospecha más sobre la relación de Sylvia y Will.

Frustrado con la cantidad de tiempo que Sylvia pasa con Will, Charlie traspasa un límite. Will se enfrenta a Reggie y a Andy.

Se dispara la tensión entre Sylvia y Will en una fiesta de bienvenida.