Nikita sigue huida después de que la acusarán de intentar asesinar al presidente de los Estados Unidos. Un periodista se interesa por lo que pasó aquella noche y la espía ve la manera de limpiar su nombre, pero Amanda le tenderá una trampa.

Nikita se reúne con Michael, Birkhoff y Ryan a bordo del centro de mando de la aeronave del equipo. Michael se niega a hablar de su relación, pero le dice a Nikita que debería quedarse con el grupo y dejar que la ayuden a limpiar su nombre.

Las tensiones siguen en aumento entre los Estados Unidos y Pakistán después de que Amanda planta la evidencia de que Pakistán contrató a Nikita para matar al presidente. Ryan comienza a sospechar del comportamiento cada vez más extraño de Birkhoff y le dice a Nikita y a Michael que piensa que Amanda pudo haber secuestrado a Birkhoff y poner un doble en el avión.

Nikita descubre que el MDK todavía está activo, así que presa de la frustración decide dar el último paso para acabar con todo, para ello contará con la ayuda de Alex.